
Fascinante descripción de la preparación y el desarrollo de los acontecimientos bélicos en la imposible defensa de la isla de Iwo Jima, pero sobre todo del hombre -Kuribayashi- que comandó a 20.000 japoneses contra el poderío norteamericano.
El libro transmite la férrea disciplina del comandante, junto con su inteligencia bélica. Pero, por encima de todo, también habla de su profunda humanidad, en su preocupación por su familia y sus soldados. En las cartas a su mujer, incluso en medio de las preocupaciones bélicas y las dificultades de sobrevivir en la isla, le pide disculpas por no poder terminar las pequeñas reparaciones en casa, recomienda la educación de sus hijos (a los que sabe que no volverá a ver), yendo en contra de la mentalidad machista de la época, y se preocupa por el clima familiar, escribiendo a su hijo pequeño: «En casa, conversa siempre amistosamente con tu madre y tus hermanas pequeñas, y a veces hazles alguna broma extraña. Es importante animar a la familia».
A día de hoy, esta terrible batalla sigue siendo una ocasión para que los familiares/descendientes de las 27.000 víctimas se reúnan cada año, japoneses y estadounidenses, para conmemorar y rezar juntos para que estos hechos no vuelvan a repetirse.
G.B. (2009)