Tolkien ideó primeramente un lenguaje, o más de uno, por su gran amor al inglés antiguo, al finés y otras lenguas; y después creó toda una mitología, sobre la que escribió sus dos grandes obras El Silmarillion y El Señor de los Anillos. Pero en su cabeza había muchas más historias y narraciones, todas pertenecientes a la misma mitología, que, sin embargo, no llegó a ultimar para su publicación. Su hijo Christopher, ha leído los borradores de su padre y sus viejos papeles, y a partir de esos apuntes y escritos ha ido publicando otras narraciones. Es el caso de esta obra, en la que además habla de todas las versiones que ha encontrado, comparándolas.
En el cuento de La Caída de Gondolin chocan dos de los principales poderes del mundo. Por un lado está Morgoth, el mal más absoluto, que está al mando de un enorme poder militar que controla desde su fortaleza en Angband. A él se opone Ulmo, el segundo Vala más poderoso, quien trabaja secretamente en la Tierra Media para apoyar a los Noldor, el grupo de elfos al que pertenecían Húrin y Túrin Turambar.