Juan Casiano, teólogo y uno de los fundadores del monaquismo occidental, nació hacia el año 365 en la Escitia menor. Siendo aún muy joven, marchó a Belén y comenzó la vida monástica. Hacia el año 400 se retiró a Constantinopla, y allí Juan Crisóstomo le ordenó diácono. Vivió durante diez años en Roma, donde se ordenó sacerdote, y más tarde fue a Marsella, donde fundó dos monasterios. Murió hacia el año 435. Sus obras han ejercido una honda influencia en el pensamiento cristiano y en la formación de los grandes santos de la Iglesia.
En torno al año 415 el autor funda la Abadía de San Víctor de Marsella, con dos monasterios, uno masculino y otro femenino. Para ellos escribe las Instituciones, en las que expone las obligaciones del monje y los vicios contra los que ha de estar prevenido, y sus Collationes. Son una especie de tratado sobre la vida interior, escrito en forma de 24 conferencias o colaciones de monjes ancianos en el desierto. Aunque se refiere a la vida de los monjes y eremitas -y en ese sentido es una apología de la vida monástica-, puede ayudar a todos por la doctrina práctica y la experiencia que recoge en bastantes aspectos.