La novela está ambientada en la Edad Media y la Reconquista española. Su argumento precede a la trama de “La visigoda”, de forma que “Astur” termina donde se iniciará esta última.
En el siglo VIII, Naya, una especie de sacerdotisa o druida astur del castro de Coaña (la actual Castro de Coaña, en Asturias) da a luz una niña cuyo nacimiento viene acompañado de una profecía. Por su parte, en la antigua ciudad visigoda de Recópolis (cerca de la actual Guadalajara), un noble visigodo es desterrado junto con su familia, y se traslada a Asturias.
Desde un punto de vista moral, el libro mantiene la línea de “La Visigoda”: los cristianos, salvo excepción, aparecen como fanáticos y crueles, que imponen su religión con el uso de la fuerza y destrozan la cultura anterior; los personajes paganos aparecen con un recto sentido religioso, y sus cultos (incluyendo los orgiásticos) se retratan de un modo positivo, etc. Aunque la autora evita las descripciones inmorales detalladas, el tono es sensual en algunos momentos.