Santiago Posteguillo ha ganado el premio Planeta con esta novela. Es de destacar la calidad de la recopilación histórica y la forma en la que recrea los tiempos vividos por los personajes históricos de todas sus novelas, y su estilo asegura el entretenimiento al lector. En este caso, la protagonista es Julia, esposa de Septimio Severo, una mujer excepcional, aunque quizá algunos de sus rasgos principales y su forma de actuar es más bien la de una persona del siglo XX. A diferencia de otros libros del autor, en este no se detiene tanto en la descripción de las batallas militares, sino que se centra más en las en el aspecto político del momento retratado.
El autor aclara al final, como es común en los libros que escribe, hasta dónde se ha dejado llevar por la ficción y qué es lo verdaderamente histórico. El ensamblaje de las dos facetas, como en las anteriores novelas, está bien conseguido y es verosímil. El autor expresa al final del libro que en general se ha dado poca importancia a la influencia de las mujeres en la historia, y da la impresión de que es una de las motivaciones que lo llevaron a escribir esta novela.
El estilo literario es positivo, aunque en algunos pasajes parece estar influido por técnicas que corresponden más bien al ámbito cinematográfico: de hecho, quizá de este libro no sería difícil sacar un buen guión para una película. Es de destacar el amor de los protagonistas, aunque hace alguna concesión a la sexualidad matrimonial, que no parece necesaria.